Aportes para la implementación de la Educación Sexual en la Escuela.

Aportes de la Profesora Marita Quiroga.

A continuación comparto una pequeña selección de contenidos que aparecen en los lineamientos curriculares y que tiene la intención de estimular inclusión de la ESI en las escuelas:

Para el NIVEL INICIAL Y PRIMARIA se sugiere un abordaje transversal, es decir que no se circunscriben a una materia particular sino que son temas que atraviesan todo el curriculum e incluyen contenidos conceptuales y actitudinales. Los temas se ordenan por asignaturas y por ciclos.

Algunas sugerencias:

Conocimiento de las distintas formas de organización familiar. Respeto y valoración por modos de vida diferentes a los propios.

Exploración de diferentes posibilidades de juego, brindando igualdad de oportunidades a niñas y niños.

Desarrollo de capacidades para tomar decisiones sobre las propias acciones, cada vez con mayor autonomía, fortaleciendo su autoestima.

Conocimiento de la diversidad entre los seres humanos.

Reconocimiento de la participación de mujeres y varones en la construcción de las identidades nacionales en sus dimensiones políticas, culturales, económicas, científicas y sociales.

Para la ENSEÑANZA SECUNDARIA, se definen contenidos por áreas disciplinares y se distinguen temas para el ciclo básico, por ejemplo:

Cs. Sociales La comprensión de procesos de construcción de identidades socioculturales y de la memoria colectiva en la Argentina actual, reflexionando críticamente acerca de las ideas en que se basan los procesos de discriminación, racismo y exclusión, particularmente aquellas ideas que originan discriminación y exclusión a partir de la identidad sexual.

FEyC: El conocimiento de los derechos de las diversidades sexuales y de la responsabilidad del Estado frente a situaciones de discriminación y violación de derechos. La exploración crítica de los estereotipos acerca de los roles sociales de mujeres y varones y los sentimientos o sensaciones que genera la discriminación.

Lengua y Literatura: 1. La producción y valoración de diversos textos que expresen sentimientos de soledad, angustias, alegrías y disfrute respecto de los vínculos con otras personas, en la propia cultura y en otras.

2. La disposición de las mujeres y los varones para defender sus propios puntos de vista, considerar ideas y opiniones de otros, debatirlas y elaborar conclusiones.

Y para el Ciclo Orientado. En el área de Formación Ética y Ciudadana se incluye:

El análisis y debate sobre las identidades sexuales desde la perspectiva de los derechos humanos. El análisis crítico de las formas discriminatorias entre hombres y mujeres en los distintos ámbitos: la escuela, el hogar, el trabajo, la política, el deporte, entre otros posibles.

El abordaje y análisis crítico de la masculinidad. La reflexión sobre las representaciones dominantes: fuerza, agresividad, violencia. La identificación de representaciones estereotipadas en la construcción de la masculinidad en los varones. La reflexión sobre las implicancias de la homofobia. El abordaje, análisis y comprensión de la masculinidad en otras culturas. La comprensión, valoración y reflexión en torno a las implicancias de la paternidad.

El abordaje y análisis crítico de la femineidad. La reflexión sobre las representaciones dominantes: fragilidad y pasividad. La identificación de estereotipos en la construcción de la feminidad en las mujeres. El análisis crítico de la subvaloración de otras formas de ser mujer que no incluyan la maternidad. El abordaje, análisis y comprensión de la feminidad en otras culturas. La comprensión, valoración y reflexión en torno a las implicancias de la maternidad.

Tanto la ley como los lineamientos curriculares asignan a la escuela una DOBLE RESPONSABILIDAD: ENSEÑAR Y CUIDAR DE SUS ALUMNOS Y ALUMNAS y ligado a ellas, se delinean obligaciones: en relación a los y las docentes aparece la OBLIGACIÓN DE DISEÑAR INTERVENCIONES QUE PERMITAN CUMPLIR CON AMBAS. Y desde el Estado la obligación de garantizar instancias de capacitación que permitan trabajar sobre la implicación que tiene la ESI en la propia subjetividad y sobre cómo nos interpela desde nuestro rol docente, a la vez que brinde herramientas para la inclusión de la ESI de manera efectiva en las escuelas.

En relación a los espacios de capacitación y de formación, tan fuertemente demandados por nosotros, los y las docentes, me permito añadir que deben ser intervenciones colectivas, mediadas teóricamente, que permitan bucear en lo que se ha ubicado históricamente en el campo de la “ignorancia”, revisar los saberes que se consideran válidos, que ocupan el lugar del “conocimiento”, situarlos histórica y socialmente, para hacer visibles las tramas de poder que lo constituyen y la carga ideológica que portan; desnaturalizar las violencias, imposiciones y jerarquías que estructuran “la escuela”. Propongo que las instancias de encuentro estimulen la formulación de nuevas preguntas más que la acumulación de verdades y certezas universales, ante las cuales conviene una mirada atenta y desconfiada.

                                                                                                Espacio Docente