Difícilmente se pueda definir como Paritaria, la reunión mantenida ayer entre dirigentes de Atech y representantes del gobierno provincial. La falta de un representante del ministerio de trabajo que medie en la negociación y que firme el acta resultante, garantizando así el cumpliendo de los términos de la misma, vacía de legitimidad dicha acta paritaria.
Por otro lado, la Secretaria General, de Atech, Estefanía Aguirre y los paritarios participantes de esta reunión no contaban con el mandato de sus representados. La consulta a los docentes fue apresurada, parcial y claramente direccionada, como continuidad de una política evidente de alejamiento de sus bases. Lejos de sus delegados y afiliados, lejos de los docentes que dicen representar, la conducción de Atech ha transformado a nuestro sindicato en un organismo más del gobierno provincial; burocrático, verticalista y obediente.
El papel jugado por los paritarios de Atech es vergonzoso. Hay que buscar mucho en la historia del movimiento obrero argentino, para encontrar el antecedente de un sindicato que se haya presentado a negociar salarios sin especificar el monto o porcentaje pedido. Se limitaron a aceptar lo que el gobierno impone como aumento y firmaron este pacto sabiendo que constituye el cierre formal de las negociaciones salariales, al menos por este año 2010, y condena a los trabajadores de la educación de Chubut a subsistir con un sueldo (uno de los más bajos del país), que no alcanza a cubrir ni la mitad de la canasta familiar de nuestra provincia. Y condena, también a todos los trabajadores estatales a recibir un aumento igual de magro e insuficiente, ya que la negociación salarial docente representa el techo salarial negociable.
Y decimos pacto, porque la ministra Mirtha Romero habló de pacto social con los docentes durante la inauguración del ciclo lectivo. Porque la lista Verde en la gestión de Atech firmó un pacto social, que exige a los docentes la total sumisión a cambio de un aumento que representa apenas una gota en el mar de la inflación. La paritaria permanente que Estefanía Aguirre y Santiago Goodman quieren vendernos como logro histórico, implica un mecanismo de sujeción que impide a los docentes la aplicación de cualquier plan de lucha para defender sus derechos o denunciar el incumplimiento, por parte del gobierno, de lo acordado.
En cada uno de sus actos, en cada uno de sus comunicados y en cada una de sus manifestaciones públicas y privadas esta nueva dirigencia de Atech ha demostrado ser funcional al gobierno de Mario Das Neves y a su candidatura presidencial. Cómo dijo el Ministro Korn, esta negociación va a ser ejemplo a nivel nacional y el gobernador les va a enseñar a los gobiernos de todo el país, cómo negociar con los docentes. La fórmula es clara: comprar la dirigencia del sindicato más representativo y arreglar un pacto social para imponer silencio y subordinación.
Desde cada rincón de la provincia donde trabaje un/a docente, debemos denunciar furibundamente este acuerdo bajo cuerda firmado por el gobierno y la dirigencia verde de Atech. Debemos exigir que sea en las asambleas escolares donde se marque la política gremial de los docentes y que sea la voz genuina de los/as educadores/as de Chubut la que se escuche en cualquier instancia de negociación con la patronal.
ESPACIO DOCENTE
en la Lila
1 comentario:
Soy docente y afiliado a Atech y necesito hacer escuchar mi protesta ante tamaña demostración de sumisión y entrega. Es evidente que a la nueva dirigencia de Atech la animan otros objetivos distintos a la defensa de los derechos de los trabajadores.
Trabajo en la escuela secundaria y las condiciones son cada vez peores. Este año tengo más de cuarenta alumnos por sección y en aulas que a duras penas entrarían treinta personas. Muy lejos del promedio de 23 con el que se llena la boca la ministra. Parece que a nadie le importa.
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